Armadura de Dios


 TOMAD TODA LA ARMADURA DE DIOS

 

 

 

“Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza. Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.

Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad,  y vestidos con la coraza de justicia, y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz. Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos” Efe 6:10-18  

 

Nuestro Dios se merece toda nuestra adoración y nuestra alabanza, aun en momentos de tribulación y angustia. El Señor  debe  ser  glorificado  por  todo. Aún en nuestros problemas debemos expresar nuestra gratitud y alabanza a Él.

 

Nuestra posición en Cristo, es una posición de victoria y no de derrota. De poder y no miedo, de dominio propio y no de debilidad ante la tentación. Jesús nos lavó con su sangre todo lo sucio que teníamos. Nos regaló una vida diferente, y nos dio una autoridad vencedora en el poder del Espíritu Santo“Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”, (2ª Tim.1:7).

 

a)   Fortalécete en el Señor. “Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza”, (Efes. 6:10). No te confíes, el hecho de sentirte bien, libre y gozoso no significa que siempre va hacer así. Este es solo el principio para que empieces una nueva vida en Cristo. Solo Congrégate, fortalécete en la oración, llénate de su presencia,  se fiel, trabaja en su obra y él te sostendrá.

 

b)   Firmeza. Estad, pues, firmes,” (ver. 14). Cuídate y permanece firme. La batalla ya se ganó. Jesucristo es el  vencedor, ya no vuelvas atrás volviendo a ensuciarte, ya no peques, Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios”, (He.10:27-27) Valora lo que Jesús ha hecho por tí.

 

c)   Cinturón de la verdad. “Ceñidos vuestros lomos con la verdad”, (ver. 14).  Cíñete con la verdad, habla solo verdad, camina y practica la verdad. Ceñido quiere decir amarrado, tienes que tener amarrada la verdad de Cristo a tu cuerpo, a tu espíritu, mente y corazón. Si en verdad ya no deseas volver atrás, tienes que cuidarte, porque si en nosotros no hay verdad y nos acostumbramos a la mentira, cuando venga la prueba vamos a desfallecer, porque la mentira nos va a quebrantar y el diablo volverá a oprimirnos. Hay espíritus mentirosos que tratarán de atacar tu mente haciéndote creer cosas que no son, pero debes de cuidar la verdad en ti.  Además, si el Señor te limpió, anda en obediencia y no te vuelvas a contaminar.

 

d)   Coraza de justicia. “Vestidos con la coraza de justicia”, (ver. 14). Esta coraza protege el corazón y los órganos vitales del tórax. Jesús es nuestra justicia y protección, y esa justicia es transmitida a nosotros para poder actuar justamente. Pero si somos injustos y no somos rectos delante de Dios, ni en nuestro trato con otras personas ni en nuestros pensamientos secretos o en nuestras motivaciones internas. Abrimos una puerta muy amplia en nuestra vida para que el mal nos ataque de nuevo. En esta condición, sin la coraza de justicia, cualquier sanidad y liberación que hayamos recibido de Dios se puede perder, se justo, actúa y practica la justicia en todo.

 

e)  El calzado del evangelio.  “Y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz”  (ver. 15). 

 

Ø  ¡Actívate en la obra! El problema de los descuidos espirituales es porque muchas veces no se está haciendo nada en la obra del Señor. No hay motivos porque orar, ni porqué luchar. Nuestros pies deben estar calzados y bien preparados para llevar y proclamar el mensaje que ha traído sanidad y paz a nuestra vida.

 

Ø  “¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído?, ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído?, ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? ¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!”, (Rom.10:14-15).  ¡calza tus pies  y predica el evangelio! ¡Esto no es simbólico! ¡hazlo real!

 

f)   El escudo de la fe. “Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno”,  (ver. 16). La fe viene por el oír, y el oír la palabra de Dios.  Éste escudo nos ayuda a extinguir los dardos de fuego del maligno. La fe se activa cuando declaramos la palabra, entonces la fe nos capacita para ver al diablo derrotado. Cuando el maligno nos bombardea con sus dardos de fuego, la fe extingue esos dardosy la duda queda vencida. Pero la fe sanadora, salvadora y restauradora solo va a ser eficaz si la pones por obra en tu vida y al servicio de los demás.

 

 

g)  El yelmo (casco) de la salvación. “Y tomad el yelmo de la salvación”(ver. 17). Esta arma protege la cabeza y significa tener la certeza de nuestra salvación. El yelmo nos es útil para renovar constantemente nuestros pensamientos. El tener la seguridad en nuestro corazón, El Espíritu Santo da testimonio a nuestro espíritu de que somos propiedad de Dios, entonces podemos descansar en su amor y con todo éxito arrojar las dudas, las cargas, los temores y tentaciones bajo sus pies. El casco protege nuestra cabeza y nos da protección contra los ataques mentales de Satanás, pero necesitamos llenarla del conocimiento de la palabra del Señor.

 

h)  La espada del espíritu, la palabra de Dios. y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios”;  (ver. 17). A través de utilizar la Espada del Espíritu, podemos atravesar el, aparente, poderoso ataque del Enemigo. Debemos escudriñar las Escrituras para ser diestros en ella,  saber usar y hablar la Palabra adecuada y con propiedad en el momento de conflicto nos traerá victoria. ¡Escrito esta! .Así, la uso el Señor Jesús contra  Satanás cuando le enfrentó en la tentación del desierto.

 

I)  Es importante la confesión de la Palabra de Dios. Leerla, memorizarla y repetirla es útil para continuar con tu salud espiritual, tu mente se seguirá liberando, su palabra nos dice: “En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad”,(Efe.4:22-24).

 

Renuévate constantemente esto traerá bendiciones sobre tu vida. Aprende las promesas de la Biblia y practícalas.

 

J)  Crucifica la carne. “Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos.  Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu”,  (Gal. 5: 24-25).  Nos dice que debemos crucificar la carne.

 

K) Limpia tu vasija y confiesa todos tus pecados al Señor. ¿Y que si no lo confiesas? Bueno Dios te dice: “Pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír”, (Isaías 59:2). No permitas que el rostro de Dios se oculte nuevamente en tu vida, ¡arrepiéntete y confiesa!ten la seguridad que El Señor te perdonara y te restaurara nuevamente. 

 

La biblia dice: “Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro.  No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en sus concupiscencias;ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia.  Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia”. (Rom.6:11-14)

 

L) Muere al pecado y vive para Dios,   No se puede recibir, ni mantener poder y sanidad espiritual sino hay una renuncia total al pecado.

 

USA LA SABIDURIA EN TODO LO QUE HAGAS.

 

El apóstol Pablo habló claramente al respecto declarando la fuente de ella, y es la que debemos hablar, sabiduría de Dios, esta es un arma poderosa y se encuentra en las sagradas escrituras, y comienza con el temor a Él. Pero para entender mejor este propósito la Biblia hace una distinción y declara que son tres las fuentes de sabiduría.

 

1.- La sabiduría de lo alto o divina. La sabiduría divina es la sabiduría que usa los mejores medios para impulsar el reino de Dios y es manifestado por el hombre espiritual. Esta sabiduría la podemos obtener de las sagradas escrituras y por  El Espíritu Santo a través de revelación al corazón del hombre. Y debe ser usada sin egoísmos, sino para edificar, aconsejar, e instruir en las cosas espirituales a las personas necesitadas.

 

2.- La sabiduría humana o terrenal. Se dedica a los intereses de esta vida y usa los mejores medios para impulsar el reino de los hombres, cada vez crea mejores aparatos, mas comodidades, impulsa la tecnología, el hombre hace planes y se proyecta. Sin embargo la sabiduría humana persigue propósitos egoístas como ganar más dinero, sin importar que con ello este destruyendo su entorno en que vive. La Biblia dice.  “….. y la ciencia se aumentara” (Dan.12:4)…..”Porque lo insensato de Dios es mas sabio que los hombres, y lo débil de Dios es mas fuerte que los hombres….(1ª.Cor.1:25). Es posible tener sabiduría humana y éxito en la vida pero sin conocer a Dios.

 

3.- La sabiduría diabólica o Satánica la biblia dice: Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis, ni mintáis contra la verdad;  porque esta sabiduría no es la que desciende de lo alto, sino terrenal, animal, diabólica. Porque donde hay celos y contención, allí hay perturbación y toda obra perversa.”, (Sant.3:14-16) 

 

De la misma manera en que Dios usa a los hombres para llevar acabo sus propósitos, Satanás también inspira a los hombres y mujeres para que ayuden a traer avance en su reino.

 

La sabiduría satánica es aplicada a veces a promover odios, rechazo, traer pleitos y contención aun entre pueblos y naciones, sabemos que hay demonios que gobiernan sobre las grandes ciudades e inspiran a la gente para cometer suicidio, crímenes, etc.

 

Los cristianos carnales a veces son tentados a usar también este tipo de sabiduría en los asuntos de la iglesia. El resultado es que; “…donde hay celos y contención, allí hay perturbación y toda obra perversa”, (Stg.3:6).

 

Amado hermano es el deseo de mi corazón que estos comentarios te sean de bendición para que aprendas a anhelar los dones y ponerlos al servicio de nuestro Señor Jesucristo. 

 

 

Pastor Daniel Vinalay.

Comentarios: 5
  • #5

    anderson fuentes (lunes, 23 marzo 2020 03:51)

    acepto a Dios y nuestro señor jesus

  • #4

    Maria fernanda (miércoles, 11 marzo 2020)

    Es la verdad absoluta......muchas gracias por ser instrumento....para los que hemos.....vuelto atras....y aun para los nuevos creyentes.

  • #3

    Jose & Maricarmen (domingo, 03 noviembre 2019 21:53)


    Para Pedro Miqueas, decirle que continuamente cogemos imágenes de internet, tampoco la cogimos directamente del blog, y no supimos en ningún momento de donde provenía . Le pedimos disculpas y decirle que la imagen ya a sido quitada de nuestra web.
    La paz del Señor invocamos sobre su vida.

  • #2

    Pedro Miqueas (domingo, 03 noviembre 2019 19:44)

    La imagen que utiliza en este post, resume el site "La Armadura de Dios" y pertenece a dicha página: https://laarmduradedios.blogspot.com/2019/07/por-sus-frutos-los-conocereis.html ponga Ud. el origen o retírela de su blog.

  • #1

    José (domingo, 20 marzo 2016 00:00)

    Pues la verdad es que han sido de grandísima bendición, el Señor bendiga a usted y a su ministerio.